El sueco Andreas Norum demostró con su primera Cafe Racer que tenía oficio. De hecho el colín que montó en su #1 causó tal sensación que ya está empezando a comercializarlo en serie. Norum vuelve a demostrar que lo suyo va para largo con su #3, una Honda CB 750 de 1999 a la que ha metido en el gimnasio para sacarle todo el músculo posible. Echale un vistazo a todo su potencial en Rewheeled Motorcycles.
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